Los onomásticos son una celebración tradicional ligada a las fiestas de los santos en el calendario cristiano ortodoxo. Cada nombre corresponde a un santo, y los individuos celebran su onomástica en la fiesta del santo homónimo. En Rusia, los onomásticos suelen tener más significado religioso que los cumpleaños y se celebran con oraciones, asistiendo a la iglesia y, a veces, recibiendo bendiciones. La persona que celebra puede organizar una pequeña reunión con familiares y amigos cercanos. Los invitados suelen traer flores, iconos religiosos o pequeños obsequios, pero la atención se centra en la reflexión espiritual y la gratitud. Históricamente, los onomásticos estaban estrechamente vinculados a la Iglesia Ortodoxa y su celebración sigue siendo la más común entre los cristianos practicantes. A diferencia de los cumpleaños, los onomásticos no están fijados a una fecha del calendario, ya que dependen del día del santo. Esta tradición también es popular en muchos otros países ortodoxos y católicos, cada uno con sus variaciones.